EL AYUNTAMIENTO DE TALAVERA RECOMIENDA EN VERANO EL CONSUMO RESPONSABLE.

El Ayuntamiento de Talavera a través de su concejalía de Ciudad Saludable y Consumo Responsable, ha lanzado la campaña institucional de consumo de la época estival para este año 2019, que lleva por lema ‘En verano…es rentable un consumo responsable’.

La concejala Marta Ramos ha considerado que es necesaria la “preparación continua de los consumidores para que dispongan de los mecanismos y actuar en el mercado de forma responsable, adquiriendo criterios propios para saber comprar o elegir entre los productos y servicios que más se adaptan a sus preferencias”.

Las cuatro recomendaciones principales sobre las que se asienta la campaña son: derechos del pasajero, fraudes en Internet, vacaciones sostenibles, créditos rápidos y tarjetas de crédito. Por eso, los objetivos de la campaña son difundir los derechos como consumidores y usuarios, concienciar a los ciudadanos de su obligación de formarse como consumidores y de realizar un consumo responsable, conocer los derechos como usuarios en el transporte público, disponer de los recursos necesarios para resolver incidencias para resolver el uso del transporte público, difundir las recomendaciones a los consumidores para minimizar fraudes en las compras a través de la web, divulgar consejos para la contratación de créditos rápidos y con tarjeta de crédito y concienciar a la población de la importancia del consumo responsable y sostenible en los lugares de vacaciones.

La campaña se difundirá además a través de folletos y cartelería, medios de comunicación y los tótems instalados en las plazas de San Francisco, Trinidad y La Paz.

LAS MAYORES QUEJAS ESTIVALES

Isabel de Miguel, responsable de la OMIC de Talavera, explica que la naturaleza de las reclamaciones no varía mucho en verano respecto al resto del año, aunque si se produce un ligero incremento en el caso de los viajes, por temas de retrasos aéreos o pérdidas de equipaje. Sin embargo, las quejas siguen siendo mayoritariamente las relacionadas con telefonía, banca y empresas de energía.

La OMIC, ha subrayado Isabel de Miguel, “es una vía administrativa que media entre las dos partes, pero la resolución es la voluntad de la otra parte para negociar”. Así, ha detallado que “en la OMIC somos más útiles para prevenir posibles reclamaciones o incidencias que pueda haber en actos de consumo que como órgano resolutorio de problemas”. En este sentido, se ha referido a que “no somos jueces que podamos obligar a ninguna parte por mucha razón que tenga el consumidor”, pero si mediamos e intercedemos para “llegar a acuerdos y resolver problemas”.

La responsable ha considerado que se resuelven un buen número de reclamaciones porque hay muchas empresas dispuestas a la mediación, pero especialmente cuando esos usuarios previamente se han informado y asesorado en la oficina. En este punto, ha reiterado que “seguimos sin leernos la letra pequeña”, aunque sí estamos más informados de los peligros y fraudes que existen en la compra de servicios o productos. Para finalizar, ha dicho que “la normativa es proporcionar la suficiente información para que el consumidor pueda elegir y decidir libremente”.